Un domingo de principios de mes, que fui a un curso de galletas, me dediqué a cocinar por la tarde. El sábado anterior había cocido garbanzos y judías azuki en cantidades industriales, así que busqué recetas que las llevaran. Y esta me llamó la atención: acabé de cocinarlo todo a las diez de la noche y creo que no he pelado más zanahorias en mi vida, pero merece la pena: está muy bueno y es un magnífico plato contundente de invierno. Como ya era muy tarde y yo estaba agotada, no medí en gramos las cantidades. Pero no creo que haya ningún problema: las recetas saladas no son una ciencia exacta, así que usad una taza grande y ya está.
La receta es de 1000 Vegan recipes, de Robin Robertson.
Ingredientes para 6 personas:
- 2 cucharadas de margarina no hidrogenada
- 2 cucharadas de harina
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 3 escalonias medianas, cortadas en trozos de 1,5 cm de espesor.
- 4 zanahorias medianas, cortadas diagonalmente en rodajas de medio centímentro
- 2 dientes de ajo picados
- 340 gramos de champiñones blancos, limpios y en cuartos
- 1 cucharadita de tomillo seco
- 1 hoja de laurel
- 1 taza de tomate triturado
- 1/2 taza de caldo vegetal o de agua
- 1 taza de vino tinto seco
- 3 tazas de alubias rojas cocidas (yo usé judías azuki)
- sal
- pimienta negra
Preparación:
En un bol pequeño, mezcla la margarina y la harina y amasa hasta que esté integrada. Pon el bol en el frigorífico, tapado, hasta que lo necesites.
En una olla grande, calienta el aceite a fuego medio. Agrega las escalonias, las zanahorias y el ajo. Tapa y cocina hasta que las verduras estén suavitas, unos 5 minutos. Agrega los champiñones y cocina, sin tapar, otros cinco minutos largos. Mis champiñones eran grandísimos, así que los tuve hasta que se redujeron a la mitad, más o menos, y me llevó un cuarto de hora.
Agrega el tomillo, la hoja de laurel, el tomate triturado, el caldo o el agua y media taza de vino. Llévalo a ebullición, luego reduce el fuego y ponlo a fuego bajo, tapa la olla y cocina unos 30 minutos, hasta que los vegetales estén hechos. Agrega el vino restante, las judías y sal y pimienta al gusto.
Vuelve a llevar de nuevo a ebullición. Luego, reduce el fuego a fuego bajo y cuece, sin tapar, unos 10 minutos. Mientras el estofado está cociendo, coge pequeños trocitos de la mezcla de mantequilla y harina que tienes en el frigorífico y añádelas a la olla. Remueve después de cada adición. Se volverá espeso el caldo. No te olvides de sacar la hoja de laurel antes de servir. Disfruta.